Una maratón diferente, aunque llevaba mas entrenamiento de lo habitual ya al tomar la salida noté que algo fallaba; las piernas rígidas y en especial los isquios muy tensos. Pensé que si no se rompia nada en los primeros 3 o 4 kilometros era buena señal y que quizás las molestias desaparecerian. Pero no fue asi, en el 4 descarté la lesión pero las poiernas me dolian y no dejarian de dolerme los siguientes 38 kilometros. A nivel de cardio las sensaciones eran inmejorables pero la mecánica dejaba mucho que desear, ayer tocaba tirar de cabeza, mucha cabeza. Los parciales cada 5 kms se mantuvieron un poco por debajo de lo previsto alrededor de los 4:40 min/km. Pude tomar un gel cada 40' aprox hasta que el estomago empezó a avisar, el calor iba a notarse y era importante beber. En todo eso iba pensando para olvidar el dolor de patas que llevaba; Durante la 1a fase del maratón por Sants y el ensanche apretando para mantener el ritmo, ya en la Meridiana correr en casa me daba ánimos, me pareció genial tener gran parte de la entrada de Barcelona para nosotros, se hizo dura, 7 kms con la mayor subida incluida que hicieron mella. A partir de ahí hay un tramo de transición donde vi que la cosa no se iba a arreglar, pasar por la media maratón con un tiempo discreto de 1:39:11 era el indicador de que no iba fino. Y Diagonal... ese tramo si es demoledor, de Forum a Torre Agbar y volver entre el 35 y el 30... el muro. En ese punto el dolor ya era de cadera, tobillos... estás en el km 30 y solo quedan 12 km, que normalmente los hacemos sin mas dificultad, pero que en esas circunstancias se me empezaron a atragantar. La media ahí bajó de 4:39 a 4:57... 20 '' el km mas lento. Se acabó el ritmillo... tocaba sufrir. En los kms 30 a 35, en Arc de Triomf el suplicio era inaguantable. Tuve que tirar de cabeza como nunca antes, el ritmo 25'' mas lento, a 5:23. Y faltaban 7 apestosos kilometros con las piernas ardiendo. Catalunya, Via Laietana i Colon aún se hicieron soportables aunque a 5:45 min/km. Quedaban 4 o 5 km, un calor de la leche y ya no entran ni los geles, la incapacidad de correr aun ritmo decente... esto es la Maratón, la lucha contra ti mismo, superarte en los malos momentos, respirar y tener un punto de vista positivo: llegaré. Sin caminar. Disfrutando de ese sufrimiento implicito en todo aquello que nos llena, paso a paso. Tirando el cuerpo hacia delante, qué facil era parar, sentarse... km 40, y veo que quedan 12' para bajar de las 3h 30', saqué motivación de ahí para hacer otro mas. Km 41, me ecuentro con Santi, compañero ya de mil y una batallas, ese dia los dos pero en especial el muy lejos de nuestra mejor forma recordando nuestra primera maratón juntos en 2008. Habia que estar ahi, forzando la máquina, con las mismas ganas que el primer dia . Km 42 y plaza Espanya. Demostrarte que vale la pena. Y esos 195 metros que se corren sin tocar suelo, y más cuanto mas te ha costado llegar a ese punto. Y un nudo en la garganta al llegar, al ver a los tuyos, y tambien al ver las mil historias de superación que horas despues iban traspasando la meta emocionados. No se qué tiene esto pero vale mucho la pena.